Los Reyes llegaron cuando no debían.

Mi año comienza con dos peculiaridades:

  1. Los Reyes Magos han llegado el 9 de enero. Papa Noel ha descubierto que no me gusta su festividad, así que directamente se ha saltado mi casa.
  2. Mi conexión a Internet es inexistente, por el momento. 
Y, explicando la segunda, debo aclarar que lo es porque ando a caballo entre dos domicilios, y uno de ellos se encuentra desconectado del mundo moderno. Esto, en ciertas ocasiones, redunda en mi beneficio; resulta muy productivo escribir cuando sabes que no puedes consultar el correo o entrar en facebook cuando te parezca. Por otro lado es perjudicial, porque, tarde o temprano, necesito realizar una consulta, o escribir este blog, verbigracia. Por ello pido disculpas si no aparece una entrada bajo, digamos, la ortodoxia acostumbrada.

Tal vez tendría que haberles pedido a los Reyes una conexión barata pero eficiente, no obstante, estoy muy contento con mis regalos. Este año la cosa ha ido sobre Lovecraft: un juego de dados especialmente diseñados para jugar a "La llamada de Cthulhu" y un libo de ilustraciones sobre los Mitos que ha llegado a mis manos cual Musa. Cada mañana, antes de sentarme a escribir la novela con la que trabajo ahora, ojeo un rato las ilustraciones... y funciona, vaya si funciona.


2 comentarios:

Acuática dijo...

Uy, pues me alegro que hayas tenido unos Reyes molones. Los míos también lo han sido. Quizás demasiado. Me muero por estrenar las cosas que me han traído, pero si lo hago ahora no podría estudiar nada. Sin duda las fechas de exámenes están fatal escogidas.
Un beso
:)

Y. dijo...

me alegro que estés contento con tus reyes. A mi parece que me ha vuelto un poco la inspiración, después de una larga sequía. Gracias por tus post porque ayudan mucho, más de lo que crees, a los que nos perdemos un poco.